Raúl Aguayo aspira a medalla olímpica
Raúl Aguayo está a punto de cumplir el sueño que lo apartó de su carrera profesional y la vida "normal", pero no está seguro si después de agosto permanezca tanto tiempo en el mar como en la actualidad.
El primer velerista dominicano en unos Juegos Olímpicos ha tenido que costear la mayor parte de su carrera y después de Beijing estaría revaluando su continuidad en el deporte de alto nivel.
"Creo que ahora mismo hay que esperar a Beijing, después de agosto vamos a ver qué pasa, pero es complicado. Seré deportista toda la vida, pero así en serio es muy difícil con las condiciones de este país", dijo Aguayo.
La falta de apoyo a un deporte que no mueve las masas, pero que produce medallas en diferentes niveles ha sido el principal obstáculo con el que Aguayo ha tropezado.
El medallista de bronce en los Panamericanos de 2003 está concentrado en la playa de Cabarete, junto a los representantes de los Estados Unidos y Canadá en la cita olímpica.
La vela modalidad láser tendrá lugar en la ciudad de Qingdao, a dos horas en avión de la capital china. Afirma que las aguas donde se competirá es difícil, ya que carecen de viento, pero tienen muchas olas, por lo que espera llegar a Asia 20 días antes de las competencias.
Consciente del gran nivel que tendrá la vela olímpica, Aguayo no quiere actuar como político demagogo, pero en su lenguaje no existe la oración que reza "lo importante no es ganar, sino participar".
"Siempre hay que aspirar a lo más alto, aspirar al pódium y ver qué pasa. En el deporte puede pasar cualquier cosa, hay que ir con ánimo, si no me lo creo yo no me lo va a creer nadie", dijo Aguayo, quien además es ingeniero eléctrico egresado de Intec.
"El límite se lo pone cada quien. Le digo a todo el mundo que no se limite, que puede conseguir su sueño", agregó.
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